El día 19 de este mes finalizará la exposición Salve, Reina del Cel i la Terra, una muestra que se puede visitar en la sede de la Fundación Bancaja y que se ha celebrado con motivo de la conmemoración del centenario de la Coronación Pontificia de la Virgen de los Desamparados (1923- 2023) y del año jubilar mariano.
Esta exposición acoge una selección de una treintena de piezas que en MATER DESERTORUM (Boletín de la Real Archicofradía de Nuestra Señora de los Inocentes Mártires y Desamparados), en su número 39, describe detalladamente (ver artículo al final de está página), los mantos, esculturas, óleos y piezas de orfebrería vinculadas a la imagen de la Virgen de los Desamparados y, en concreto, al acto de su coronación en 1923.
La Iglesia San Juan del Hospital ha cedido temporalmente para esta muestra la talla de la Virgen de los Desamparados creada por el artista valenciano Pedro Arrúe y que está inspirada en la escultura primitiva de la Virgen de los Desamparados de finales del siglo XVI, que estaba desprovista de peluca, manto y otros elementos.
En la Fundación Bancaja hemos podido ver durante estos meses la imagen de la Virgen tumbada, una recreación de la postura con la que la Virgen de los Desamparados ejercía su advocación: ser colocada sobre el féretro de los ajusticiados o necesitados sobre los que la Cofradía practicaba el auxilio en el momento de la muerte. La tradición atribuye, por eso, la condición de «geperudeta» a la patrona, propio de una imagen yacente, que así estuvo hasta el año 1631.
La talla, que pronto volverá a San Juan del Hospital, la encontraremos en la Capilla Santa María Madre de Dios, donde se situaba la pintura de la Virgen de la Leche.
ARTÍCULO BOLETÍN MATER DESERTORUM: DE LA PÁGINA 18 A LA 24.